Fuente: Agencia Venezolana de Noticias (AVN)
Caracas.- Es temporada de vacaciones escolares, pero eso no hace gran diferencia para ellos. Tienen más de 55 años y, ya jubilados de sus trabajos, en qué invertir el tiempo libre es una de sus principales preocupaciones.
Cuando en la ciudad abundan los grandes autobuses repletos de niños en planes vacacionales, también hay otros transportes, en los que se aprecian el mismo entusiasmo y la alegría, sazonados por la experiencia de los años vividos. Son las unidades del Instituto Venezolano de los Seguros Sociales (IVSS), en las que los adultos mayores llegan a diferentes destinos turísticos del país sin costo alguno, para disfrutar de lo que el Estado ha denominado el Turismo Social.
Este programa, ideado por el comandante de la Revolución Bolivariana, Hugo Chávez, está dirigido a las poblaciones vulnerables, y es impulsado tanto por el Ministerio de Turismo como por el IVSS, en el caso particular de los adultos mayores.
En junio, datos de Mintur dieron cuenta de que unos 500.000 adultos mayores de todo el país han podido conocer los atractivos turísticos del territorio nacional de manera gratuita, gracias a este plan. Adicionalmente, las rutas sociales, activadas hace cuatro años por el IVSS, han abarcado a más de 33.000 personas, precisó el mes pasado el presidente del organismo, Carlos Rotondaro.
"Creo que es algo especialísimo para nosotros, las personas de la tercera edad, que siempre hemos estado como abandonados. Me siento muy satisfecha. Me parece maravilloso", confiesa Damelys Lugo, una yaracuyana de 63 años, jubilada hace siete años del Ministerio de Agricultura y Tierras.
Ella formó parte este martes de un nuevo grupo de cincuenta adultos mayores, todos extrabajadores de ese despacho, que visitó la Colonia Tovar, una población montañosa de gran atractivo turístico ubicada a solo sesenta kilómetros de Caracas. "Me he reencontrado con tanta gente que tenía tiempo que no veía. Es como un reencuentro entre amigos, de nuestra misma edad, de nuestros mismos intereses, de nuestros mismos valores", afirmó.
Este es el segundo paseo de Lugo dentro del plan de Turismo Social, pues en mayo pasado visitó la isla de Margarita, el principal destino turístico de Venezuela. El programa estatal organiza paseos por día o con estancia de hasta tres noches, con comidas, recreadores, transporte y alojamientos gratis.
"Creo que es algo muy especial que el Seguro está haciendo por nosotros y que nunca se había visto en nuestro país", señaló Lugo. Madre de tres hijas, su juventud y adultez estuvo entregada siempre al trabajo y al hogar, lo que, aunado a la estrechez económica que siempre caracterizó a la Venezuela de hace décadas, le hizo casi imposible hacer turismo.
"Ahorita estoy viajando mucho. Nunca pensé que después de los sesenta años iba a viajar, sinceramente", reveló. "¿A qué se debe? Eso es el legado del presidente Chávez. Eso es irrefutable. Fue el único que se preocupó por los viejitos, por las personas con discapacidad, por los jóvenes, por los niños, por la mujer; por los olvidados de siempre".
Tomados en cuenta
Para Irene González, una mujer de 56 años jubilada del MAT, este plan de turismo evidencia "que el Estado toma en cuenta a los viejitos, en una edad en que realmente podemos disfrutar. Es la retribución a lo que ya invertimos en el país".
"Son muy buenos paseos", señala sobre el programa, que ya la llevó hace pocos meses al estado Bolívar, para conocer los destacados atractivos naturales del sur del país.
El paseo de este martes fue todo un jolgorio para este grupo. Despiertos desde muy temprano, poco después de las 7:00 de la mañana ya estaban todos a bordo de su autobús, rumbo a la Colonia Tovar, esa población fundada en 1843 por inmigrantes alemanes, donde el hermoso paisaje montañoso, el clima agradable y una rica gastronomía atraen perennemente a miles de personas.
La primera parada, a pocos metros de la Colonia, es para deleitar un manjar venezolano como el golfeado, especie de pancito enrollado con capas de papelón y queso blanco. Para todo el que suba a esta zona es imperdonable evadir este antojo.
Ya en el destino, a solo hora y media de la capital, se aprecia un paisaje en el que se combinan el verdor de las montañas con los cultivos tradicionales, y en ellos destacan los duraznos y fresas que, además, son utilizados para dulces preparaciones.
Los abuelitos, a bordo de vehículos rústicos, se adentran en el sector El Paují, para conocer un centro de acopio de durazno y el proceso que deben superar hasta convertirse en mermeladas o frutas en almíbar, además de una fábrica de licores artesanales que produce alcohol a base de moras, fresas, parchita y hasta chocolate.
Los adultos mayores escuchan con atención las explicaciones, bromean entre ellos, sonríen para los flashes de las cámaras que capturan este momento. "Es un regalo valioso para nosotros. Es un recuerdo inmenso para todos", señaló Rita Ibarra, otra de las jubiladas y presidenta de la Asociación que los agrupa.
En Venezuela hay 2.480.000 pensionados por el IVSS, cuando en 1998 solo existían unos 500.000. El Estado ha podido extender la cobertura del sistema de seguridad social, y les garantiza una pensión equivalente al salario mínimo mensual, ubicado en la actualidad en 2.457,02 bolívares.
Adicionalmente, ya va casi medio millón de adultos mayores atendidos por la Gran Misión En Amor Mayor, dirigida a abuelos que aunque no cuentan con las cotizaciones legales para este beneficio y que ahora tienen también derecho a una pensión.
Los adultos mayores de 55 años interesados en gozar de estas rutas de turismo social pueden dirigirse a las oficinas del IVSS, en Caracas y en los diferentes estados del país, para apuntarse al plan, con la cédula de identidad como único requisito. Antes del viaje -el Instituto organiza al menos dos por semana-, son sometidos a una evaluación médica.
Otra opción es enviar una comunicación al Ministerio de Turismo, a través del correo electrónico dgtp@mintur.gob.ve o directamente a la sede, ubicada en La Floresta, Caracas.
